No nos miramos, no nos tocamos, ni nos sentimos, ni bailamos, ni reimos, solo hay palabras, miles y miles de palabras que van por el mismo cauce y desembocan en sueños imposibles de realizar.
Tus arrebatos me llaman, tu sonrisa agoniza y tu la disfrutas, luego echas a llorar y no entiendes porqué, eres un alma libre con tiempo limite para disfrutar, cuando todo acaba tus alas se ven encadenadas a tu propia impotencia, quieres pero no te atreves, deseas pero parece que los astros se han puesto de acuerdo para ir en tu contra y yo lo se, y lo denuncio cada noche mirando el inmenso cielo y enfrentandome a ellos, gritando las injusticias que sufres, tu, corazón, no sufras más, me tienes, pero, ¿me sientes?, ¿me ves?, ¿ves el interior de mi corazón?, ¿porque la mirada que busco se dirige a otros ojos?, no importa seguire luchando por ti, para que seas libre. Pero me ven insignificantemente pequeño, es una guerra con final trágico, que no puedo ganar por mi cuenta, pero no importa.
Resignado vuelvo a mi cama y rezo, no he conseguido que te liberes de tus propias cadenas, pero he pactado una nueva oportunidad para despertar y tener la ocasión de verte, tan sencilla y tan complicada y exagerada y amable y sincera y loca, en definitiva, tu.
Dicen que estoy loco, que me dedico a una causa perdida, que mi tiempo pasa poco a poco delante de mi cara y no me estremezco y yo respondo a esos insensatos, "ella es mi pasión, es mi energia, mis latidos y mi sangre, puede que esté a la sombra, pero ¿no os habeis planteado la posibilidad de que lo mejor esta por venir?.
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